Antes de ser una artista manga, Hiromu Arakawa pasó siete años trabajando como granjera en Hokkaido. Bien conocedora de todas las emociones que son parte del trabajo del campo, captura las difíciles realidades de la agricultura diaria en Japón mientras que señala esta dura y poderosa forma de vida en un serie de episodios divertidos. Conocida por multitud de trabajos en los cuales celebra las alegrías de la vida, en esta serie Arakawa revela sus propias raices y algunos hechos de su vida menos conocida como granjera.