Una mujer se ha declarado a Lupin, y el está de acuerdo. Tras la desaparición de la estatua de la libertad, se dice que en algún rincón de la estatua se esconde un diamante que controla un virus informático letal.
Un grupo encubierto de malvados satánicos quiere tenerlo en su poder para comenzar una guerra mundial, pero Lupin está tras ellos para conseguir que borren su historial delictivo y poder seguir en paz.